No es un dato nuevo que la demanda argentina de la adquisición de propiedades en Uruguay crece año a año, la cercanía geográfica y la estabilidad del país oriental motorizan un mercado de inversión más alto aún por causa de la pandemia.
Punta del Este tiene mejores defensas que la mayoría de los mercados inmobiliarios. Motorizado por un ecosistema de inversión uruguayo marcado por la previsibilidad y la estabilidad, por la histórica oferta de calidad y por su consolidación como destino que apela más allá del comprador argentino, la demanda crece año a año. Esa misma solidez siempre ha permitido que el Este uruguayo emprenda una rápida recuperación post-pandemia que incluirá a miles de argentinos, principalmente de gran poder adquisitivo, a mudarse buscando seguridad jurídica, menor carga impositiva y una mejora en la calidad de su vida.
Este crecimiento en la demanda no proviene solamente del mercado argentino, viene también por el lado de los compradores brasileños, europeos, americanos y, en una tendencia que se vio reforzada durante la pandemia, de los mismo uruguayos. Son muchísimos los montevideanos que a raíz de la pandemia, comenzaron a trasladarse hacia el Este para realizar su trabajo remoto y luego empezaron a instalarse en la Península y a impulsar muchísimo su segmento de gama media. Se estima que unos diez mil familias se radicaron con domicilio permanente en el departamento de Maldonado durante el último año y medio.
Lo que puede llegar a suceder cuando incrementa tanto la demanda y la crisis en Argentina persiste y no se ve una recuperación en el horizonte, es que se genere una posible sobre-oferta, pero el mundo inmobiliario se muestra tranquilo. “Punta del Este siempre tuvo un inventario más alto que la demanda. Es propio de lugares que tienden a desarrollarse. Con demanda en ascenso y pocos proyectos arrancando ‘desde cero’ por la pandemia, esa brecha se achica cada vez más”, concluye Alejandra Covello, titular de Covello Propiedades, que tiene sucursales en Montevideo, Punta del Este, Carmelo y Colonia.